Y desde el comedor nos saluda Claudia, nuestra monitora. Formada en pedagogía Waldorf, acompaña a los niños cada día, dando continuidad al trabajo realizado por las maestras durante la mañana, cuidando el momento durante el que los niños comen, creando armonía en este importante proceso y poniendo conciencia en los beneficios de los alimentos que toman y en la importancia de alimentarse para nutrirse.

«Los niños llegan al comedor, esperan pacientes a que todos estén sentados… Claudia presenta el menú y todos recitan el poema que da inicio a la comida. Les habla de dónde viene lo que están comiendo, introduce cuentos e historias que llenan de imágenes este sentir… «

Alimentarse para nutrir el alma. Porque un niño bien alimentado está preparado para el aprendizaje y desarrollo a todos los niveles: corporal, emocional y anímicamente.